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Ernesto Zedillo reitera críticas a la reforma judicial: “conduce a una tiranía”

El expresidente defiende su postura en contra de la reforma y responde a las críticas del presidente López Obrador


El expresidente Ernesto Zedillo Ponce de León ha mantenido firme su postura contra la propuesta de reforma al Poder Judicial de la Federación, reiterando que esta medida pondría en riesgo la independencia del sistema judicial en México y podría llevar al país hacia una tiranía. En una entrevista reciente con el periodista Ciro Gómez Leyva, Zedillo calificó la reforma como una amenaza grave y atroz para la justicia en México.

Durante la inauguración de la International Bar Association en la Ciudad de México, el pasado 15 de septiembre, Zedillo ya había expresado su preocupación por la reforma, que considera que permitiría a los poderes Ejecutivo y Legislativo controlar la designación de jueces, en lugar de permitir que el pueblo tenga una verdadera participación. El exmandatario criticó que, bajo la apariencia de un sistema democrático, el poder judicial podría quedar bajo el control de un partido político dominante, lo que él definió como tiranía.

En su entrevista con Gómez Leyva, Zedillo destacó que la reforma presentada en el Diario Oficial de la Federación (DOF) es una maniobra para manipular la justicia. Cuando un partido oficial puede manejar el Poder Judicial, eso se llama tiranía, afirmó. El expresidente enfatizó que la reforma no solo es ilegítima y poco ética, sino que también traiciona los principios democráticos de la Constitución.

Zedillo también respondió a las críticas del presidente Andrés Manuel López Obrador, quien, en su conferencia matutina de este martes, se burló de las preocupaciones expresadas por el exmandatario, tachándolas de ridículas. Zedillo aclaró que su intervención no fue improvisada y que decidió abordar el tema en este momento debido a su importancia, aprovechando la invitación que había recibido con anterioridad para participar en el evento de la International Bar Association.

El exmandatario también condenó el comportamiento del presidente, acusándolo de actuar de manera despectiva al usar lenguaje ofensivo contra sus críticos. Zedillo subrayó la importancia de respetar las voces disidentes y de mantener un debate civilizado sobre cuestiones de gran relevancia para la democracia mexicana.