Ejidatarios exigen detener expansión de planta termoeléctrica en Lerdo
Demandan a la CFE diálogo inmediato y advierten sobre acciones legales y protestas
Ejidatarios de Villa Juárez, en el municipio de Lerdo, han exigido a la Comisión Federal de Electricidad (CFE) que suspenda las obras de expansión de la planta termoeléctrica Guadalupe Victoria, citando graves preocupaciones ambientales. Los campesinos han solicitado a la empresa pública que convoque a una mesa de diálogo en un plazo máximo de una semana. De no recibir respuesta, advirtieron que procederán con movilizaciones sociales, incluyendo la toma de instalaciones, y acciones legales mediante amparos.
Los ejidatarios denuncian que la ampliación de la termoeléctrica, un proyecto que data del gobierno de Carlos Salinas de Gortari (1988-1994), está causando daños significativos al medio ambiente. Entre las preocupaciones destacadas se encuentran la sobreexplotación de mantos acuíferos, la contaminación del río Nazas debido a los desechos de la planta, y la destrucción de la vegetación local.
Además, los afectados recordaron que, en la década de 1990, la CFE expropió sus tierras sin compensación adecuada. Aseguran que, aunque se prometió un pago justo por las 125 hectáreas de riego expropiadas, el monto recibido fue inferior al valor real de las tierras. También se comprometió la contratación de familiares de campesinos y la asignación de subsidios para obras públicas en la región, compromisos que, según los ejidatarios, nunca se cumplieron de manera satisfactoria.
Los miembros del ejido Villa Juárez señalaron que los subsidios anuales prometidos fueron desviados hacia el ayuntamiento de Lerdo, dejando a la comunidad sin los beneficios esperados. Asimismo, criticaron la falta de revisión periódica de las actividades de la planta para prevenir daños ambientales, a pesar de las promesas hechas en el pasado.
Actualmente, los ejidatarios de Villa Juárez están preocupados por la posible violación del decreto expropiatorio de 1989, que establecía un plazo de cinco años para la expansión de la planta, tras el cual las tierras deberían ser devueltas a los ejidatarios si no se cumplía con el proyecto.
Como acciones concretas, los campesinos exigen la suspensión inmediata de los trabajos de expansión realizados por la empresa china HBP, la reforestación de las riberas del río Nazas y la instalación de un invernadero ejidal para apoyar a la comunidad.