Fiscales estadunidenses planean utilizar como evidencia, conversaciones que interceptaron a sicarios de Guerreros Unidos durante y después de la desaparición de los 43 normalistas de Ayotzinapa, la noche del 26 y madrugada del 27 de septiembre de 2014, como parte del proceso contra Adán Zenén Casarrubias Salgado, "El Tomatito", uno de los líderes del cártel. 

El Departamento de Justicia quiere utilizar los chats, obtenidos de celulares Blackberrys intervenidos, como evidencia del tráfico de drogas que Guerreros Unidos realizaba de Iguala, Guerrero, a la ciudad de Chicago, comunicaciones que sólo se conocen parcialmente y que podrían revelar nueva información clave para el caso Ayotzinapa.

Que sierren las carreteras con los transpotistas para que aiga presensia del gobierno federal () Que sea la de chilpo y la del mole, se leé en una de las conversaciones que sostiene Adán Zanén con un sicario, mismas que se han filtrado y hecho públicas.

Las autoridades federales no han podido cerrar dicho momento histórico para mal en México, tal cómo se prometió al inicio de este sexenio, de hecho, versiones de las mismas autoridades actuales destacan parte de lo otorgado por las autoridades de la administración de Enrique Peña Nieto, lo que llamaron "la verdad histórica".