Aumento desmedido de precios en alimentos básicos afecta la dieta mexicana

En México, la tradicional dieta mexicana se ve amenazada por un aumento alarmante en los precios de frutas y verduras básicas, lo que ha llevado a que estos productos esenciales sean considerados un "lujo" por parte de la población.

En los últimos años, los costos de alimentos han experimentado incrementos significativos, atribuidos en gran medida a problemas de producción exacerbados por sequías y erosión de cultivos. Según datos de la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco), estados como Tamaulipas y Veracruz han registrado aumentos de hasta un 200% en el precio de algunas verduras.

El cilantro, por ejemplo, ha visto un aumento drástico en su precio, pasando de 100 a 360 pesos por racimo para los comerciantes, mientras que para los consumidores finales oscila entre 8 y 20 pesos, dependiendo del estado, según el Sistema Nacional de Información e Integración de Mercados (SNIIM).

Otros alimentos como el brócoli, el chayote y la lechuga también han experimentado incrementos considerables, alcanzando precios de hasta 60 pesos por kilo para el brócoli, 70 pesos por kilo para el chayote y 40 pesos por pieza de lechuga, frente a los 25 pesos previos.

El programa Quién es Quién en los precios de la Profeco reveló que el chile serrano promedió 56.33 pesos por kilo hasta el 7 de junio, mientras que el azúcar y el huevo superan los 30 pesos por kilogramo.

La Alianza Nacional de Pequeños Comerciantes (ANPEC) ha expresado preocupación por el impacto del consumo irresponsable y la falta de cuidado en los cultivos, señalando que estas prácticas contribuyen al alza de precios y a la escasez de productos. Además, destacan que la inacción frente al cambio climático continúa afectando la producción agrícola, ganadera y pesquera, exacerbando aún más la dificultad del poder adquisitivo de los consumidores.

Ante este panorama, la población mexicana enfrenta retos significativos para mantener una alimentación saludable y accesible, en un contexto económico que compromete seriamente la estabilidad de los hogares y el bienestar de la sociedad.