Julio César Almanza Armas, presidente de la Federación de Cámaras de Comercio en Tamaulipas (Fecanaco) y prosecretario de la Confederación de Cámaras de Comercio, Servicios y Turismo (Concanaco), fue asesinado el lunes en Matamoros, minutos después de denunciar la creciente ola de extorsiones por parte del crimen organizado en la región.

Almanza Armas, quien en 2010 fue candidato del PRD a la gubernatura de Tamaulipas, murió alrededor de las 14:15 horas tras ser atacado por dos individuos en motocicleta. Los agresores dispararon nueve balazos mientras se encontraba dentro de su vehículo, después de salir de las oficinas de la Cámara Nacional de Comercio (Canaco) en la colonia Buena Vista.

El ataque se produjo poco antes de una entrevista que Almanza Armas tenía programada con la periodista Pamela Cerdeira. En el momento del ataque, el empresario iba acompañado de su hermana, quien resultó ilesa. Las autoridades locales confirmaron el deceso del dirigente poco después de llegar al lugar para brindar asistencia.

El asesinato de Almanza Armas se produce en medio de su reciente denuncia sobre la crisis de extorsiones en Nuevo Laredo, donde reportó el cierre de 193 tiendas OXXO y siete gasolineras debido a amenazas de grupos criminales. Según Almanza, estas extorsiones han generado pérdidas significativas para las empresas afectadas, estimadas en más de 50 millones de pesos. Las bandas criminales habrían exigido información personal de los empleados, incluyendo credenciales de elector, lo que aumentó la preocupación por la seguridad de los trabajadores y la operatividad de los negocios.

La Confederación de Cámaras de Comercio de Tamaulipas (Concanaco Tamaulipas) y la Concanaco condenaron enérgicamente el asesinato de Almanza Armas. Octavio de la Torre de Steffano, dirigente de la Concanaco, expresó su profunda consternación y anunció que está en contacto con la Secretaría de Gobernación y el gobernador de Tamaulipas, Américo Villarreal Anaya, para exigir una respuesta rápida y eficaz ante la inseguridad que afecta a la región.

De Steffano subrayó que "la seguridad es básica para el bienestar de nuestras familias, comerciantes, empresas y negocios familiares", y enfatizó la necesidad de erradicar la violencia que está perjudicando el desarrollo social y económico en el estado.

Almanza Armas, además de su rol en la Fecanaco y Concanaco, era un prominente empresario con intereses en farmacias, arrendamiento de bienes inmuebles y el sector de importación y exportación. Su asesinato resalta la grave situación de inseguridad en Tamaulipas, especialmente para la comunidad empresarial que enfrenta una creciente amenaza de extorsiones y violencia por parte de grupos criminales.

La Concanaco y la comunidad empresarial local han pedido a las autoridades un compromiso firme para garantizar la seguridad y justicia en Tamaulipas, a fin de evitar que tragedias como la de Almanza Armas se repitan en el futuro.